Cómo actualizar a Windows 11: un tutorial completo paso a paso

Actualizar a Windows 11 puede resultar un poco abrumador, sobre todo con todos los requisitos y pasos necesarios. A veces, incluso estando seguro de que tu PC cumple con las especificaciones, la actualización se bloquea o simplemente no aparece en Windows Update. O quizás descargaste una ISO nueva, pero no se instaló correctamente. La verdad es que Windows tiene sus peculiaridades, y averiguar qué impide una actualización o cómo forzarla puede ser un verdadero fastidio. No siempre es sencillo, pero existen algunos métodos probados que han funcionado, como revisar los requisitos del sistema con más atención, ajustar algunas configuraciones o incluso usar herramientas de línea de comandos si la cosa se complica. El objetivo es obtener una experiencia renovada con Windows 11 sin complicaciones. Obtendrás un sistema operativo moderno y optimizado con todas las funciones más recientes, e incluso con menos errores si lo haces bien. Ten en cuenta que algunas configuraciones pueden ser un poco complicadas; por ejemplo, puede que el actualizador automático no considere tu hardware compatible, aunque lo sea. O que los archivos de actualización se bloqueen debido a problemas con los controladores o errores de disco. La paciencia y un poco de solución de problemas suelen ser la solución, así que no des por sentado que está totalmente muerto si se bloquea al 20 %.Ahora, veamos las soluciones prácticas que podrían impulsar la actualización.

Cómo forzar la actualización de tu PC a Windows 11 cuando no aparece

Método 1: Verifique la compatibilidad y los requisitos

Sí, lo sé, suena básico, pero a veces la actualización no se muestra porque Windows considera que tu hardware no es compatible. Usa la aplicación PC Health Check de Microsoft o herramientas de terceros como Winhance para verificar la compatibilidad. Asegúrate de tener TPM 2.0 habilitado en la BIOS y el Arranque seguro activado, ya que Windows 11 es muy exigente con estos aspectos. Si todo parece correcto y sigue sin aparecer en Windows Update, no te preocupes. A veces, la caché de Windows Update o la falta de componentes son los culpables, y restablecer o activar la actualización manualmente puede ser útil.

Método 2: Descargar e instalar manualmente mediante la herramienta de creación de medios

Mira, si Windows Update se está empecinando, puedes evitar la espera. Ve a la página oficial de descarga de Windows 11 y descarga la Herramienta de Creación de Medios. Es un poco engorrosa, pero es fiable. Ejecuta la herramienta, selecciona “Actualizar este PC ahora” y se encargará del trabajo pesado. Este método omite el servidor de actualizaciones y, a menudo, ignora los problemas de compatibilidad de hardware que el software podría intentar detectar. Ten en cuenta que conviene desactivar o desinstalar temporalmente cualquier antivirus de terceros, ya que a veces interfieren con la instalación del sistema operativo. Además, asegúrate de que tu sistema tenga suficiente espacio libre (se recomiendan más de 64 GB).

Método 3: utilice la línea de comandos para activar manualmente la actualización

Bueno, esto es un poco más técnico, pero a veces Windows no indica por qué bloquea una actualización. Puedes intentar usar PowerShell o el Símbolo del sistema para forzar la actualización. Abre PowerShell como administrador y ejecuta este comando para iniciar el Solucionador de problemas de Windows Update:

Start-Process "ms-settings:windowsupdate" -Verb runAs

Luego, vuelva a buscar actualizaciones. Si esto no funciona, puede borrar la caché de Windows Update deteniendo el servicio y eliminando los archivos almacenados en caché:

net stop wuauserv del /f /s /q "%WinDir%\SoftwareDistribution\Download" net start wuauserv

Tenga en cuenta que en algunas configuraciones esto falla la primera vez, pero luego funciona después de reiniciar. Porque a Windows le encanta ser tan misterioso.

Método 4: Utilice el Asistente de instalación de Windows 11

Sí, es similar a la Herramienta de Creación de Medios, pero más sencillo. Simplemente descarga el Asistente de Instalación de Windows 11 de Microsoft. Comprobará si tu dispositivo está listo y lo actualizará directamente sin necesidad de crear un USB de arranque. Esto puede ser especialmente útil si la actualización parece oculta o inactiva. Sin embargo, ten en cuenta que si tu hardware no cumple con las especificaciones, es posible que esto no se procese, pero vale la pena intentarlo.

Método 5: comprobar si hay problemas con el controlador o el hardware

Un último punto a considerar: los controladores obsoletos o incompatibles también pueden bloquear la actualización. Visita el sitio web del fabricante de tu dispositivo o usa el Administrador de dispositivos y actualiza todos los controladores críticos, especialmente los de gráficos, red y almacenamiento. Además, comprueba si hay errores de disco en chkdsk /f /rel Símbolo del sistema para asegurarte de que tu unidad no presente problemas. En una configuración, vi que la actualización se detenía debido a un controlador de gráficos con varias versiones de retraso; la actualización finalmente permitió que Windows 11 se instalara. Sinceramente, es un fastidio, pero el pequeño esfuerzo merece la pena.

Ten en cuenta que la tecnología no siempre es justa. A veces, solo hay que probar diferentes métodos, reiniciar e incluso desinstalar aplicaciones de terceros que podrían estar interfiriendo. Normalmente, con uno de estos métodos, tu PC se actualizará a Windows 11 sin mayores complicaciones.