A veces, Windows 11 simplemente no funciona con fluidez, sobre todo al manejar varias aplicaciones o trabajar con programas que consumen muchos recursos. Aumentar la memoria virtual puede ser una buena solución; es como darle al sistema un respiro. No es una solución milagrosa, pero en algunas configuraciones, es suficiente para hacer las cosas mucho más llevaderas. El proceso no es muy complicado, pero navegar por la configuración puede ser un poco confuso al principio, sobre todo porque a Windows le encanta ocultar opciones avanzadas tras capas de menús. Una vez que le coges el truco, cambiar la configuración de la memoria virtual suele resultar en una experiencia notablemente más fluida, sobre todo durante tareas intensivas. Eso sí, no esperes que esto convierta a una patata en una bestia de los videojuegos; es más una curita que una solución para un hardware obsoleto.
Cómo aumentar la memoria virtual en Windows 11
Esta guía te explicará cómo aumentar la asignación de memoria virtual en Windows 11. Piensa en la memoria virtual como si usaras tu disco duro como una extensión de la RAM: ayuda cuando tu sistema empieza a colapsar bajo carga. El objetivo es asegurar que tu sistema pueda procesar más datos sin paralizarse.
Abrir propiedades del sistema: la ruta más rápida
- Primero, haz clic derecho en el botón InicioWin + X o presiona y selecciona Sistema. Esta es la forma más sencilla de acceder a la información básica de tu PC.
- Una vez en la ventana Sistema, busca el enlace ” Configuración avanzada del sistema”. Suele estar a la derecha o cerca de la parte inferior, según la configuración de tu pantalla.
Si estás realmente perdido, el código de trucos es escribir `sysdm.cpl` en el cuadro de diálogo Ejecutar ( Win + R) — inmediatamente abre la ventana Propiedades del sistema clásica que necesitas.
Vaya a Configuración avanzada del sistema
- Haga clic en la pestaña “Avanzado” en la ventana “Propiedades del sistema”.Aquí es donde Windows guarda algunas de las opciones de rendimiento más interesantes.
- Pulsa el botón Configuración en la sección Rendimiento. Esto abre las Opciones de Rendimiento, que están un poco escondidas, pero son cruciales para esta tarea.
Opciones de acceso a memoria virtual (archivo de paginación)
- En la ventana Opciones de rendimiento, vaya a la pestaña Avanzadas.
- Haga clic en el botón Cambiar… en Memoria virtual. Si está desactivado, es posible que necesite permisos de administrador o comprobar si tiene suficiente espacio en disco.
Aquí es donde ocurre la magia, o puede fallar si no tienes cuidado. Windows suele gestionar esto automáticamente, pero para configurarlo manualmente, desmarca la opción ” Administrar automáticamente el tamaño del archivo de paginación para todas las unidades”.
Establecer tamaños de memoria virtual personalizados
- Seleccione la unidad que desea modificar (normalmente C:).
- Elija tamaño personalizado.
- Introduce valores en Tamaño inicial y Tamaño máximo.¿Una buena regla general? Define el tamaño inicial aproximadamente 1, 5 veces la RAM instalada (por ejemplo, si tienes 8 GB de RAM, empieza con unos 12 288 MB) y el máximo en 3 veces esa cantidad o un poco más. En algunos sistemas, un valor demasiado alto puede causar problemas de espacio en disco, así que no te excedas.
- Haz clic en “Establecer” y luego en “Aceptar”. Es posible que tengas que reiniciar el sistema para que los cambios surtan efecto.
A veces, esto puede mejorar el rendimiento durante tareas múltiples intensas o cuando las aplicaciones alcanzan los límites del sistema.
Consejos para aumentar la memoria virtual en Windows 11
- Asegúrate de tener suficiente espacio libre en el disco: la memoria virtual puede ocupar mucho espacio si la configuras demasiado.
- Mantén Windows actualizado. A veces, estos ajustes funcionan mejor después de una o dos actualizaciones.
- Considere agregar más RAM si modifica la memoria virtual con frecuencia. La memoria virtual es una solución temporal, no un sustituto del hardware real.
- Tenga cuidado al configurar tamaños de memoria virtual excesivos, ya que pueden causar sobrecarga del disco o saturar su SSD/HDD. El equilibrio es clave.
- Después de los cambios, controle el rendimiento de su sistema: si parece lento, reduzca el rendimiento un poco.
Preguntas frecuentes
¿Qué es realmente la memoria virtual en Windows 11?
Básicamente, es tu RAM más espacio en el disco duro que actúa como RAM adicional. Cuando la RAM física está llena, Windows transfiere algunos datos a este espacio, lo que ayuda a mantener el sistema en funcionamiento.
¿Para qué aumentar la memoria virtual? ¿Realmente servirá?
Si su sistema va lento al gestionar varios programas, aumentar la memoria virtual puede ayudar a prevenir fallos y retrasos, ya que le da a Windows más espacio para administrar todos esos datos. No soluciona el problema del hardware lento, pero a veces basta para evitar fallos.
¿Puedo configurar la memoria virtual al máximo?
Técnicamente sí, pero cuidado: esto puede provocar un colapso del disco y llenar el almacenamiento rápidamente. Lo ideal es equilibrar la memoria virtual sin excederse. Generalmente, lo mejor es seguir los tamaños recomendados por Windows o alguna variante de la regla general.
¿Es mejor la RAM física?
Por supuesto. La RAM es mucho más rápida que la memoria virtual almacenada en un disco duro o SSD. Piensa en la memoria virtual como una red de seguridad, no como un sustituto.
¿Aumentar la memoria virtual dañará mi PC?
Generalmente no, pero configurarlo demasiado alto puede causar otros problemas, como un rendimiento lento o quedarse sin espacio en disco. Use los tamaños recomendados y controle su almacenamiento.
Resumen
- Abra Propiedades del sistema: acceso directo `sysdm.cpl` o a través de Configuración.
- Acceda a la configuración avanzada del sistema.
- Abrir opciones de rendimiento.
- Vaya a Memoria virtual y presione Cambiar.
- Desmarque la administración automática, seleccione la unidad y configure un tamaño personalizado según su RAM.
Resumen
Aumentar la memoria virtual en Windows 11 no es una solución mágica, pero puede darle a tu sistema un impulso extra cuando se sobrecarga. Es como encontrar el equilibrio: si la configuras demasiado baja, te arriesgas a fallos; si la configuras demasiado alta, el disco puede verse sobrecargado. Normalmente, un pequeño ajuste aquí y allá ayuda a evitar esos molestos bloqueos y lentitud. No digo que vaya a convertir tu viejo portátil en una máquina, pero si la multitarea te parece un poco complicada, esto podría ayudar un poco. Simplemente mantén tus expectativas realistas y recuerda: más RAM física sigue siendo clave. Crucemos los dedos para que esto ayude a evitar esos frustrantes bloqueos por más tiempo.