Cómo cambiar de plan de energía en Windows 11: Tutorial paso a paso

Cambiar el plan de energía en Windows 11 puede parecer sencillo, pero puede resultar un poco complicado según lo que intentes hacer. A veces, las opciones predeterminadas no te dan suficiente control, o ciertos planes quedan inactivos debido a permisos o políticas del sistema. Si tu dispositivo se comporta de forma extraña (por ejemplo, entra en modo de suspensión demasiado rápido, se agota la batería más rápido de lo esperado o simplemente no se mantiene en el modo correcto), ajustar estas configuraciones puede ser de gran ayuda. Solo es cuestión de saber dónde buscar y cómo llegar sin complicaciones.

Cómo cambiar el plan de energía en Windows 11

Acceder a los menús correctos: no siempre es obvio

Para empezar, la forma tradicional es a través del Panel de Control, pero como Windows 11 está bastante obsesionado con las aplicaciones de Configuración, esto podría parecer un desvío. Aun así, si prefieres seguir con el método clásico, aquí te explicamos cómo:

  • Haga clic en el botón Inicio o presione Windows key.
  • Escriba Panel de control y presione Enter.
  • Vaya a Hardware y sonido y luego a Opciones de energía.

Si esto te resulta complicado, otra forma rápida de hacerlo es a través de la aplicación Configuración: Configuración > Sistema > Energía y batería. A veces, Windows oculta los planes de energía con unos pocos clics adicionales, sobre todo si usas un dispositivo administrado o una configuración corporativa.

Crear o cambiar a un plan diferente: ¿qué funciona mejor?

Una vez en Opciones de energía, verá su plan actual y algunas alternativas como Equilibrado, Ahorro de energía y Alto rendimiento. Si no ve el plan que desea, quizás porque esté oculto o deshabilitado, quizás deba hacer clic en ” Mostrar planes adicionales”. En algunas configuraciones, estas opciones se desactivan mediante políticas de grupo o administradores del sistema; en ese caso, deberá realizar ajustes en el registro o consultar con su administrador.

Elegir un plan es sencillo: solo tienes que hacer clic en él. Pero para mayor control, puedes crear un plan personalizado y ajustar aspectos como el tiempo de espera de la pantalla, la suspensión del disco duro, la administración de energía del procesador, etc. Para ello, haz clic en Cambiar la configuración del plan y luego en Cambiar la configuración avanzada de energía.

Ajustar la configuración: no siempre es obvio, pero vale la pena

Aquí es donde ocurre la magia. Puedes, por ejemplo, configurar el estado mínimo del procesador al 5% para ahorrar batería o forzar que el sistema permanezca activo durante más tiempo ajustando los temporizadores de suspensión. Todo lo que hay ahí se puede personalizar para que se adapte mejor a tu estilo de uso. Una advertencia: en algunos equipos, cambiar esta configuración podría requerir reiniciar para que surta efecto, así que no te preocupes si no parece funcionar de inmediato.

Guardar y probar su nuevo plan: por qué es importante

Una vez que estés satisfecho con los ajustes, haz clic en Guardar cambios. A partir de ese momento, tu dispositivo debería funcionar según tu nuevo plan, ya sea ahorrando energía o maximizando el rendimiento. Presta atención si se comporta de forma extraña; a veces, Windows restablece esta configuración después de actualizaciones o entra en conflicto con aplicaciones de terceros.

Consejos para gestionar tus planes de energía como un profesional

  • Comprueba si has iniciado sesión como administrador; de lo contrario, muchas opciones de energía estarán bloqueadas.
  • Si sus planes faltan o aparecen en gris, consulte las políticas de grupo o los ajustes de registro, que pueden ser una molestia, pero a veces son necesarios.
  • Usa el icono de la batería en la barra de tareas para acceder rápidamente: haz clic derecho y selecciona ” Configuración de energía y batería”. Ahí encontrarás opciones rápidas o enlaces para cambiar de plan.
  • Para las computadoras portátiles, considere crear planes personalizados adaptados a su rutina diaria, como un plan de ahorro de batería para viajes y un plan de rendimiento para juegos o trabajo.
  • Recuerda: algunas configuraciones, como la configuración del estado mínimo del procesador, se encuentran en la configuración de energía avanzada. Está un poco oculta, así que no olvides explorar esos menús.

Preguntas frecuentes

¿Cómo puedo crear un nuevo plan de energía?

En Opciones de energía, busca “Crear un plan de energía” en la barra lateral izquierda. Elige un plan básico, nómbralo y personalízalo a tu gusto.

¿Por qué no puedo cambiar mi plan de energía?

A veces, sobre todo en dispositivos del trabajo o la escuela, Windows puede restringir los cambios mediante políticas. Además, necesitas derechos de administrador, sin peros. Revisa tu cuenta de usuario si faltan opciones.

¿Cuál es el mejor plan de energía para jugar?

Si priorizas los juegos, normalmente buscas un alto rendimiento, pero ten en cuenta que agotará la batería más rápido. En una computadora de escritorio, está bien, pero en una portátil, vigila la duración de la batería.

¿Puede Windows cambiar los planes de energía automáticamente?

En algunas configuraciones, puedes usar herramientas o scripts de terceros para automatizar el cambio según condiciones como el nivel de batería. Sin embargo, Windows no lo hace muy bien de forma nativa.

¿Es arriesgado modificar los planes de energía?

Generalmente no. Pero si configuras tu sistema para que funcione al máximo rendimiento constantemente, podrías experimentar un mayor consumo de energía y mayor calor. Con los dispositivos que funcionan con batería, esto es una desventaja.

Resumen

  • Abra el Panel de control o Configuración para Opciones de energía.
  • Elige o crea un plan adaptado a tus necesidades.
  • Ajuste la configuración avanzada si es necesario.
  • Guarde y pruebe cómo se comporta su sistema.

Resumen

Controlar los planes de energía no es precisamente una ciencia exacta, pero Windows a veces lo complica un poco. Ajustar estas configuraciones puede prolongar la duración de la batería o mejorar ligeramente el rendimiento cuando sea necesario. No te sorprendas si reiniciar o acceder a los derechos de administrador se convierte en un obstáculo; al fin y al cabo, es Windows. Espero que esto ayude a alguien a ajustar su configuración sin complicarse demasiado.¡Mucha suerte y felices ajustes!