Cambiar rápidamente entre ventanas no es solo un truco sofisticado; puede agilizar el flujo de trabajo y hacer que la multitarea sea mucho menos complicada. A veces, cambiar de una aplicación a otra resulta complicado, sobre todo si gestionas varias tareas a la vez. Por suerte, existen algunos métodos probados para hacerlo sin problemas, ya sea que prefieras atajos de teclado o clics visuales. Porque, claro, Windows tiene que complicarlo más de lo necesario con sus propias banderas y atajos rápidos. Esta guía te ayudará a cambiar de una aplicación a otra abierta sin problemas, o al menos a sentirte un poco menos frustrado.
Cómo cambiar entre ventanas con mayor fluidez
Básicamente, se trata de que tu ordenador trabaje para ti, y no al revés.¿El objetivo? Ahorrar tiempo, reducir el clic sin sentido y, con suerte, parecer un poco más profesional ante quien te esté viendo. Estos métodos funcionan tanto para Windows como para Mac, y algunos consejos podrían incluso simplificarte la vida con diferentes configuraciones. Una vez que domines estos métodos, cambiar de sistema se convertirá en algo natural y te preguntarás cómo te las arreglabas sin ellos.
Método 1: Uso de atajos de teclado: Alt + Tab y Comando + Tab
Este es el movimiento clásico, y algo obvio para la mayoría de las personas. Es lo que probablemente usaste cuando aprendiste a cambiar de ventana. Mantén presionada la tecla Alt y pulsa la tecla Tab. Aparecerá una pequeña ventana emergente que muestra todas tus aplicaciones abiertas: iconos, miniaturas, lo que sea que muestre tu sistema operativo. Sigue presionando Alt y pulsa la tecla Tab repetidamente para desplazarte. En algunas configuraciones, es extraño; a veces, la lista no se actualiza instantáneamente o se retrasa. No estoy seguro de por qué, pero parece funcionar mejor si sueltas la tecla Alt después de seleccionar la ventana correcta para confirmar. En Mac, se aplica el mismo principio con Comando + Tabulador. Si mantienes presionada la tecla Comando y pulsas la tecla Tabulador, se recorren las aplicaciones horizontalmente. Repite para ir más adelante y más atrás. En algunas Mac, esto se puede personalizar en Configuración, pero la mayoría de la gente se queda con la opción predeterminada.
Método 2: Usar el ratón — Barra de tareas o Dock
Si hacer clic te resulta más natural y no te gustan los atajos de teclado, simplemente haz clic en el icono de la aplicación en la barra de tareas (Windows) o el Dock (Mac).Es súper sencillo, como si apuntar y hacer clic fuera la forma más rápida a veces. Pero esto solo funciona si ya ves la aplicación ahí; si mantienes la barra de tareas limpia, es una forma rápida de cambiar sin recordar combinaciones de teclas. Ten en cuenta que, en algunas configuraciones, la barra de tareas puede estar desordenada, así que organizar los iconos para mantener las aplicaciones que usas con frecuencia al frente marca una gran diferencia. Y, por supuesto, con varios monitores, hacer clic puede no ser suficiente, pero sigue siendo más rápido que rebuscar entre los selectores de tareas.
Método 3: Uso de la vista de tareas/control de misión
Esta opción es un poco más visual y útil si estás haciendo malabarismos con muchas cosas. En Windows, presiona Windows + Tab. En Mac, presiona F3 o Control + Flecha arriba. Esto mostrará todas tus ventanas abiertas en una vista general. Es como tener una vista aérea del escritorio, muy útil si intentas seleccionar una ventana específica en medio del caos. A veces, estas vistas se ralentizan o se bloquean, especialmente si tu sistema es pesado, pero generalmente funcionan bien. En algunos equipos, pueden ser un poco lentas, pero después de reiniciar o cerrar aplicaciones en segundo plano, la experiencia es más fluida.
Consejos adicionales para un cambio más fluido
- Memoriza los atajos : cuanto más uses Alt + Tabo Command + Tab, menos pensarás en ello, lo que hará que la multitarea sea casi algo natural.
- Organiza tus aplicaciones abiertas : Mantén las que más usas en lugares predecibles o ancladas en la barra de tareas/dock. Menos problemas.
- Cierra las ventanas que no uses : El desorden ralentiza todo. Menos ventanas hacen que cambiar de una ventana a otra sea más rápido y menos confuso.
- Utilice atajos de teclado combinados con clics del mouse : a veces, una combinación funciona mejor: cambie con el teclado y luego haga clic en los íconos para confirmar en qué ventana desea enfocarse.
- Revisa tu configuración : Por ejemplo, algunas configuraciones de Windows tienen Escritorios Virtuales o accesos directos personalizados en Configuración > Sistema > Multitarea. Los usuarios de Mac podrían ajustar las opciones de Mission Control para una mejor respuesta.
Preguntas frecuentes
¿Cuál es la forma más rápida de cambiar de ventana en una PC?
En general, Alt + Tab sigue siendo la mejor opción para cambiar rápidamente de teclado. Es instantáneo y funciona prácticamente en cualquier lugar.
¿Puedo cambiar los atajos?
Sí, Windows te permite personalizar atajos en Configuración > Dispositivos > Escritura > Configuración avanzada del teclado, pero está un poco oculto. En Mac, puedes configurar atajos en Preferencias del Sistema > Teclado > Atajos.
¿Qué pasa si Alt + Tab no responde?
Verifique nuevamente su teclado, reinicie el Explorador en el Administrador de tareas (presione Ctrl + Shift + Esc> busque Explorador de Windows > haga clic derecho > Reiniciar) y asegúrese de que ninguna otra aplicación esté interfiriendo.
Cambiar entre varios monitores: ¿cómo funciona?
Los atajos como Alt + Tab funcionan en todos los monitores por defecto. Si no es así, revisa la configuración de pantalla. Windows también cuenta con la Vista de Tareas con varios escritorios para una mejor organización.
Resumen
- Presione Alt + Tab o Comando + Tab.
- Mantenga presionada la tecla y tóquela repetidamente para explorar las aplicaciones abiertas.
- Utilice Shift + Tab para realizar ciclos inversos.
- Haga clic en los íconos en la barra de tareas o en el dock para acceder rápidamente.
- Pruebe la Vista de tareas/Control de misión para obtener una descripción general visual.
Resumen
Cambiar de ventana con facilidad ahorra tiempo y frustraciones. Claro, requiere un poco de práctica, pero una vez que se te dé bien, te moverás como un ninja de la multitarea. Estos trucos son bastante fiables, y en algunas configuraciones pueden resultar un poco torpes, salvo por lag del sistema o interrupciones de procesos en segundo plano, que son comunes. Aun así, con algunos ajustes, suelen funcionar. Cruzamos los dedos para que esto te ayude a agilizar el proceso.