Hacer capturas de pantalla en Windows es casi una habilidad de la vida diaria: uno pensaría que es sencillo, pero a veces las herramientas integradas fallan o no hacen exactamente lo que quieres. Quizás el botón “Imprimir Pantalla” no funciona, o buscas una forma más limpia y precisa de capturar solo una parte de la pantalla sin complicaciones. Es molesto cuando tienes prisa y tu método habitual no funciona. Por eso, esta guía se centra en soluciones prácticas, no solo en la jerga técnica, y te ofrece formas prácticas de hacer esa captura de pantalla sin complicaciones. Una vez que le pilles el truco, capturar cualquier cosa en la pantalla será más predecible y menos frustrante.
Cómo solucionar problemas de captura de pantalla en Windows
Método 1: Verifique si la tecla Imprimir pantalla funciona o necesita reasignarse
A veces, la tecla Impr Pant no funciona porque se ha reasignado o desactivado. Primero, asegúrate de que funcione: prueba a pulsarla y luego pegar ( Ctrl + V) en Paint o Word. Si no aparece nada, es posible que esté desactivada en la configuración del teclado o en aplicaciones de terceros.
Para reasignar, una solución rápida es usar una utilidad como SharpKeys o el Administrador de teclado de Microsoft PowerToys. Estas te permiten asignar la función Impr Pant a otra tecla si es necesario. Simplemente abre PowerToys, ve al *Administrador de teclado* y reasigna una tecla que no uses mucho a la función Impr Pant. Recuerda siempre reiniciar el ordenador o actualizar el controlador del teclado después de reasignar si no funciona de inmediato.
Esto ayuda porque Windows depende de esta tecla y, si está desactivada, nada más registrará los comandos de captura de pantalla.
Método 2: utilice las herramientas de recorte integradas o Recortar y dibujar (si los atajos no funcionan)
A veces, la forma más sencilla es prescindir del teclado. Las aplicaciones Recortes o Recortes y bocetos de Windows están integradas y son bastante fiables, si las encuentras. Prueba a buscarlas en el menú Inicio escribiendo “Recortes” o “Recortes y bocetos”.
Especialmente útil: en Windows 10 y 11, puedes presionar Windows + Shift + S. Es un poco raro, pero es la forma más rápida de abrir el menú de recortes sin complicaciones. Ofrece opciones como recorte de forma libre, rectangular, de ventana o de pantalla completa, y lo copia automáticamente al portapapeles. A veces, el atajo de teclado falla, quizás debido a un conflicto o un fallo del controlador, por lo que abrir la aplicación manualmente ayuda.
Desde allí, puedes anotar o guardar directamente, lo que es una ventaja para quienes desean tener control sobre las imágenes finales.
Método 3: Restablezca o actualice su controlador de pantalla (si los accesos directos de captura de pantalla simplemente no se registran)
En algunos casos, el problema podría estar relacionado con el controlador. Si los accesos directos de captura de pantalla no funcionan o las aplicaciones integradas funcionan de forma extraña, prueba a actualizar el controlador de pantalla. Ve al Administrador de dispositivos, busca Adaptadores de pantalla, haz clic derecho en tu GPU (como Intel, NVIDIA o AMD) y selecciona Actualizar controlador. A veces, una simple actualización soluciona los fallos.
Si eso no funciona, deshabilitar temporalmente y volver a habilitar el controlador de pantalla puede restablecer el sistema. Y si se atreve, desinstalar el controlador y dejar que Windows lo reinstale puede solucionar conflictos extraños, especialmente si el controlador gráfico está desactualizado o dañado.
Por supuesto, Windows tiene que hacerlo más difícil de lo necesario y los problemas con el controlador de gráficos a veces pueden afectar el modo en que se procesan los accesos directos.
Método 4: utilice herramientas de captura de pantalla de terceros como alternativa
Si todo lo demás falla, existen muchas aplicaciones de terceros que pueden hacer el trabajo mejor y, a veces, son más fiables que las opciones integradas de Windows. Herramientas como ShareX o Greenshot son populares, gratuitas y están repletas de opciones como captura con desplazamiento, capturas de pantalla con retraso y edición rápida. Suelen solucionar problemas o conflictos del teclado que dificultan el uso de las herramientas de Windows.
¡Rayos!, a veces estas aplicaciones incluso tienen sus propias teclas de acceso rápido, y en algunas configuraciones, simplemente funcionan mejor. No sé por qué funciona en una máquina y no en otra, pero vale la pena intentarlo si tus métodos habituales fallan.
Otra cosa a tener en cuenta: revisa los permisos de tu sistema y de las aplicaciones.
En Windows 10 y 11, asegúrate de que las aplicaciones tengan permiso para acceder a tu pantalla. Ve a Configuración > Privacidad y seguridad > Grabación de pantalla (o similar) y activa la opción “Permitir acceso”.Si estos permisos están desactivados, algunas herramientas de captura de pantalla, especialmente las de terceros, no funcionarán correctamente. Es un paso un tanto extraño, pero a veces Windows puede bloquear el acceso de las aplicaciones sin notificaciones directas.
Y, como es más fácil solucionar problemas que entrar en pánico, verifique que ningún antivirus o paquete de seguridad esté bloqueando sus herramientas de captura de pantalla o teclas de acceso directo.
Todos estos pasos pueden parecer un poco complicados, pero en algunas configuraciones, marcan la diferencia entre un botón de captura de pantalla roto y una captura de pantalla completamente funcional. En una configuración funcionó después de actualizar los controladores; en otra, reasignar la tecla Impr Pant ayudó a solucionarlo. Nada de magia, solo solucionar problemas hasta que todo funcione.
Resumen
- Compruebe si la tecla PrtScn funciona o necesita reasignarse usando herramientas como Winhance.
- Utilice Windows + Shift + S o abra la herramienta Recortes/Recortes y bocetos manualmente cuando los atajos fallen.
- Actualice o restablezca los controladores de pantalla si las teclas de acceso directo no responden.
- Pruebe aplicaciones de terceros como ShareX o Greenshot para obtener resultados más confiables.
- Verifique la configuración de privacidad de Windows y el software de seguridad para ver si hay restricciones en la captura de pantalla.
Resumen
Capturar pantalla en Windows no siempre es sencillo: el hardware, las peculiaridades de los controladores o los conflictos de software pueden dificultarlo. Pero confiar en una combinación de herramientas integradas y algunas opciones de terceros, además de una solución de problemas básica, suele ser suficiente. A veces, simplemente actualizar un controlador o reasignar la tecla soluciona los fallos extraños. Recuerda que no todas las soluciones funcionan para todos, así que un poco de prueba y error es parte del juego. Esperamos que estos consejos te ayuden a ahorrar tiempo y frustración la próxima vez que el botón de captura de pantalla se niegue a funcionar.