Crear una partición de disco en Windows 11 no es tan intimidante como parece, pero puede ser un poco frustrante si no se está familiarizado con las herramientas. A veces, es necesario reorganizar la unidad: quizá configurar un espacio separado para el trabajo, instalar un sistema operativo diferente o simplemente mantener el orden. Es bastante sencillo, pero es importante comprender los pasos y las opciones, especialmente si se hace en un equipo con datos importantes. La clave es ser precavido; manipular particiones de disco sin copias de seguridad puede ser arriesgado. Además, la herramienta Administración de discos de Windows es decente para particiones básicas, pero no es perfecta; a veces se niega a redimensionar ciertas unidades, especialmente si son particiones de sistema o de recuperación. En esos casos, es posible que deba buscar software de terceros.
Cómo crear una partición de disco en Windows 11
Abra Administración de discos manualmente o mediante accesos directos
Primero, tienes que acceder a Administración de discos. La forma más sencilla es hacer clic derecho en el botón Inicio y seleccionar Administración de discos. O, si prefieres algo más sofisticado, pulsa Win + Xy selecciona Administración de discos. Está integrado en Windows y verás todas tus unidades allí, incluidas las particiones del sistema protegidas y bloqueadas.
A menudo, la unidad que quieres modificar aparecerá casi llena o con espacio sin asignar al final. De lo contrario, podrías necesitar reducir una partición existente para liberar espacio (más información en breve).
Seleccione una unidad para reducir y liberar espacio
Haz clic derecho en la unidad donde quieras liberar espacio y selecciona ” Reducir volumen”. Por eso es útil saber cuánto espacio quieres liberar. A veces, Windows solo puede reducir un poco debido a archivos inamovibles o a la fragmentación. Si esto ocurre, podría ser necesario un desfragmentador o un gestor de particiones de terceros. Al seleccionar ” Reducir volumen”, te preguntará la cantidad de espacio (en MB) que quieres liberar. Sé realista: no reduzcas más de lo que puedas perder de esa unidad.
Decide cuánto espacio liberar y reducir
Escribe el tamaño de la nueva partición que quieres. Por ejemplo, si quieres 50 GB, serían unos 51200 MB. Pulsa “Reducir” y Windows lo hará. A veces es rápido, a veces tarda un poco, dependiendo de lo ocupado o fragmentado que esté el disco. No te sorprendas si tarda un poco.
Una vez hecho esto, debería ver espacio marcado como Sin asignar. De lo contrario, verifique que la unidad se haya reducido correctamente. En mi experiencia, reducir un volumen a veces falla la primera vez, especialmente si se trata de una unidad del sistema. Simplemente reinicie y vuelva a intentarlo si es necesario.
Crea tu nueva partición a partir del espacio no asignado
Haga clic derecho en el área sin asignar y seleccione “Nuevo volumen simple”. Aparecerá un asistente sencillo que le guiará en la asignación de una letra de unidad y las opciones de formato. Cabe destacar que Windows usa NTFS de forma predeterminada, a menos que configure una unidad especial, como una unidad para Mac o Linux.
Sigue las instrucciones: asigna una etiqueta que puedas recordar, elige el formato (normalmente NTFS) y deja que termine. El formateo puede tardar unos segundos o un minuto, dependiendo del tamaño, así que ten paciencia.
Termine y pruebe su nueva unidad
Una vez finalizado el asistente, la nueva partición aparecerá en el Explorador de archivos con la etiqueta que le haya asignado. Ahora puede empezar a almacenar archivos allí, instalar aplicaciones o incluso prepararla para un arranque dual si ese es el objetivo. No sé por qué funciona, pero a veces reiniciar ayuda a Windows a reconocer la nueva unidad correctamente, especialmente justo después de crearla.
Consejos para crear una partición de disco en Windows 11
- Asegúrese de tener suficiente espacio libre en la unidad actual antes de reducirla: no es divertido perder archivos importantes debido a una partición demasiado pequeña.
- Use etiquetas descriptivas para sus particiones. Esto mantendrá la claridad en el futuro.
- Verifique el formato del sistema de archivos: NTFS suele ser el mejor, pero si desea utilizar la unidad con otro sistema operativo, considere FAT32 o exFAT.
- Si Windows no reduce el tamaño de una unidad o si las cosas se ponen raras, considere usar herramientas como Winhance u otro software de terceros para tener más control.
Preguntas frecuentes
¿Qué es la partición de disco?
Básicamente, divide tu disco físico en secciones separadas, cada una actuando como una miniunidad.Útil para organizar, instalar varios sistemas operativos o mantener ciertos archivos aislados.
¿Es seguro particionar mi disco?
Generalmente sí, pero siempre haz una copia de seguridad primero. Porque, seamos sinceros, Windows a veces puede ser impredecible, y un error extraño o una subida de tensión pueden causar problemas durante el particionado.
¿Puedo fusionar particiones más tarde?
Sí, pero las herramientas integradas de Windows no son muy buenas para fusionar. Normalmente, aplicaciones de terceros como EaseUS Partition Master o MiniTool Partition Wizard funcionan sin problemas.
¿Cuánto espacio debo asignar para una nueva partición?
Depende de para qué lo uses: almacenamiento multimedia, copias de seguridad o incluso un sistema operativo dedicado. Simplemente no asignes todo el espacio restante; deja algo para Windows y las actualizaciones para que no se estropee.
¿Cuál es el mejor sistema de archivos para una nueva partición?
NTFS para Windows. Si buscas compatibilidad multiplataforma, quizás FAT32 o exFAT, pero NTFS es el sistema más común y confiable para usuarios de Windows.
Resumen
- Abra Administración de discos desde el menú Usuario avanzado o haciendo clic derecho en Inicio.
- Seleccione la unidad que desea reducir y defina cuánto espacio liberar.
- Reduce el volumen y encuentra el espacio no asignado.
- Crea un nuevo volumen simple a partir de ese espacio.
- Formatee y etiquete su nueva partición.
Resumen
Particionar no es algo que se haga a diario, pero una vez que se le coge el truco, resulta bastante práctico. Solo recuerda: haz copias de seguridad, ten paciencia y no asignes más espacio del que puedas perder. A veces, Windows puede ser terco, así que reiniciar o usar una herramienta de terceros puede ser útil. En resumen, es una buena manera de mantener tus discos organizados sin descontrolarte. Ojalá esto ayude a alguien a configurar una nueva partición sin problemas.