Cómo deshabilitar las actualizaciones de Windows: una guía completa paso a paso

Desactivar las actualizaciones de Windows puede parecer sencillo, pero sinceramente, puede ser un poco complicado según la versión y configuración de Windows. A veces, las opciones habituales no funcionan del todo bien, o se siguen colando nuevas actualizaciones. Si estás cansado de los reinicios automáticos o las instalaciones inesperadas, esta guía te ofrece algunos pasos prácticos (sí, incluso los más complicados) que realmente funcionan. Se trata de controlar tu sistema sin romperlo todo y quizás evitar algunos dolores de cabeza en el futuro.

Cómo desactivar las actualizaciones de Windows

¿Qué está pasando realmente detrás de escena?

Deshabilitar las actualizaciones no se trata solo de activarlas en la configuración. A Windows le gusta defenderse, sobre todo con las versiones más recientes. Por eso, a veces es necesario ser más práctico, como deshabilitar el servicio de actualizaciones. Esto es útil si las actualizaciones son persistentes o si simplemente se desea mayor control. Después de esto, el equipo dejará de actualizarse automáticamente, pero deberá recordar comprobarlo manualmente si desea instalar esos parches de seguridad más adelante.

Método 1: Deshabilitar Windows Update a través de la configuración

Primero, ve a Configuración desde el menú Inicio. Luego, ve a Actualización y seguridad. En Windows Update, busca opciones como “Pausar actualizaciones”; esto es útil para una pausa temporal. Puedes elegir una fecha, normalmente hasta 35 días antes. No es ideal, pero ayuda si solo quieres un descanso por ahora. Para un control más permanente, ve al Método 2.

Método 2: Deshabilitar el servicio de actualización de Windows

Aquí es donde se vuelve más confiable, especialmente cuando Windows reinicia constantemente. Escribe services.mscen la barra de búsqueda y pulsa Intro. Localiza Windows Update en la lista. Haz doble clic en él y configura el tipo de inicio en Deshabilitado. Haz clic en Detener si el servicio se está ejecutando y pulsa Aceptar.

Esto detiene el servicio de actualización a un nivel más profundo, por lo que, aunque Windows intente reactivarlo, a menudo no lo hará. Sí, es un poco más intenso, pero funciona en la mayoría de las configuraciones. Recuerda que para reactivarlo es necesario volver a configurar el tipo de inicio en Automático y reiniciar el servicio.

Consejo adicional: utilice el Editor de políticas de grupo (para ediciones Pro o Enterprise)

En algunas PC, también puedes ajustar esto mediante el Editor de directivas de grupo local. Ve a Configuración del equipo > Plantillas administrativas > Componentes de Windows > Windows Update. Busca la opción ” Configurar actualizaciones automáticas” y desactívala. Esto suele ser más estable que modificar los servicios, pero solo está disponible en Windows 10/11 Pro y versiones posteriores.

Cuándo utilizar estos métodos

Si notas que Windows instala actualizaciones críticas o se reinicia constantemente cuando no quieres, estos trucos pueden ayudarte a evitarlo. En algunos equipos, basta con deshabilitar el servicio; en otros, configurarlo mediante la directiva de grupo lo mantiene. Ten en cuenta que esto no es infalible: Microsoft siempre puede deshacer tus ajustes durante las actualizaciones, así que compruébalo de vez en cuando.

Consejos adicionales y precauciones

  • Cree siempre un punto de restauración del sistema antes de realizar estos cambios. Como Windows suele complicar todo más de lo necesario, más vale prevenir que curar.
  • Si depende en gran medida de ciertas aplicaciones, considere los riesgos: dejar su sistema sin parchear no es lo ideal desde el punto de vista de la seguridad.
  • Recuerde que es posible que tenga que volver a habilitar las actualizaciones más adelante para mantenerse al día con los parches de seguridad; a veces, Windows o herramientas de terceros volverán a habilitar las actualizaciones después de ciertas actualizaciones o parches importantes.
  • Utilice las guías oficiales de Microsoft si desea obtener más información sobre cómo controlar las actualizaciones en un entorno más administrado.

Sinceramente, desactivar las actualizaciones puede ser un poco complicado, pero si lo que se necesita es control, estos pasos suelen funcionar. No sé por qué funciona, pero en una configuración se bloqueó tras deshabilitar el servicio, pero en otra, Windows seguía intentando reactivarlo tras reiniciar. Así que, a veces, hay que repetirlo o ajustarlo.

Resumen

  • Acceda a Servicios (busque services.msc) y deshabilite Windows Update.
  • Opcionalmente, ajuste la configuración en la Política de grupo si está disponible.
  • Tenga en cuenta que las actualizaciones pueden volver después de grandes parches de Windows: verifique periódicamente o vuelva a deshabilitarlas si es necesario.
  • ¡Siempre haz una copia de seguridad primero! Porque, claro, Windows tiene que complicarlo más de lo necesario.

Resumen

Detener las actualizaciones de Windows no es precisamente fácil, pero se puede lograr con un poco de investigación. Se trata de encontrar ese equilibrio: mantener el control sin perder parches de seguridad esenciales. Como mínimo, estos métodos te dan tiempo suficiente antes de que las actualizaciones te interrumpan el día. Ojalá esto te ayude a ahorrarte algunos problemas a largo plazo.