Cómo Incrementar la Memoria de Video en Windows 10: Guía Completa

Asignar Más Memoria de Video en Windows 10: Lo Que Debes Saber

Modificar la memoria de video en Windows 10 puede parecer complicado, pero en realidad es una forma sencilla de mejorar el rendimiento gráfico de tu equipo. Esto no significa que puedas añadir VRAM a tu tarjeta gráfica de la noche a la mañana; en lugar de eso, se trata de permitir que tu sistema tome prestada una parte de la memoria RAM para facilitar tareas relacionadas con los gráficos. Ideal para esos momentos en los que los juegos o programas pesados se vuelven lentos. Para ello, tendrás que entrar en la BIOS, lo que implica reiniciar y navegar con atención.

Este proceso suele ser útil cuando notas que tu portátil o PC de escritorio se ralentiza durante actividades con mucha carga gráfica. Si detectas ligeros tirones o bajadas en los fps, reasignar algo de memoria puede solucionar el problema. Eso sí, ten en cuenta que puede ser un equilibrio delicado; asignar demasiada RAM a gráficos puede hacer que otras tareas funcionen más lentamente. Es un pequeño mal necesario, pero pasa.

Primero lo primero: Reiniciar

Reinicia tu equipo y prepárate para entrar en la BIOS antes de que Windows cargue. Pulsa ese botón de reinicio y prepárate para apretar una tecla—como F2, Supr o Esc, dependiendo de tu equipo. Cuando aparezca la pantalla de inicio, empieza a pulsar esa tecla como si fuera la que activa tu juego favorito. Si no lo consigues, tendrás que empezar de nuevo.

Entrar en la BIOS

Al reiniciar, en ocasiones la pantalla te indicará qué tecla debes pulsar para acceder a la BIOS… si tienes suerte. El truco está en hacerlo en el momento adecuado. Si fallas, y Windows arranca normalmente, solo tienes que intentarlo otra vez. Algunos equipos permiten acceder desde Windows 10 también. Solo ve a Configuración > Actualización y seguridad, haz clic en Recuperación y selecciona Reiniciar ahora bajo Inicio avanzado. Luego, escoge Solucionar problemas > Opciones avanzadas > Configuración de firmware UEFI, y dale a Reiniciar. De esta forma, podrás acceder sin tener que jugar con los tiempos de arranque.

Buscar Configuración Avanzada

Una vez en la BIOS, usa las teclas de flecha para localizar algo como Avanzado. Ahí es donde la magia de la memoria de video sucede. Puede que tengas que rebuscar un poco, ya que diferentes marcas organizan sus menús de manera distinta—puede estar bajo pestañas llamadas Configuración de gráficos o similar. Tómate tu tiempo; no estamos en una carrera contra reloj.

Modificar la Configuración de Memoria de Video

Busca opciones como “Tamaño de memoria compartida VGA” o “Asignación de memoria gráfica”. Incrementa ese valor; generalmente puedes subirlo desde 64MB a 128MB, o más si tu BIOS lo permite. Recuerda, no todos los BIOS dejarán que lo pongas a tope, así que revisa cuál es el máximo soportado por tu hardware.

También, presta atención a cuánta memoria estás asignando. Dar demasiado a gráficos puede dejar a otras tareas sin recursos suficientes. La clave está en encontrar un equilibrio: prueba un pequeño aumento y observa si nota alguna diferencia.

Guardar Cambios y Reiniciar

¿Has configurado todo? Busca la opción Guardar y Salir, que suele estar en F10, para aplicar los cambios. Tu equipo se reiniciará y, si todo salió bien, Windows arrancará con la nueva asignación de memoria de video. ¡Crucemos los dedos!

Cosas a Tener en Cuenta

  • No todos los BIOS permiten ajustar la memoria de video. Si no aparece esa opción, podría ser una limitación del hardware. Algunos fabricantes bloquean estas configuraciones, así que no siempre podrás cambiarlo.
  • Si no encuentras esa opción, considera actualizar el BIOS desde la página del fabricante. Pero recuerda, sigue las instrucciones cuidadosamente para no dejar tu sistema inoperable.
  • Asegúrate de administrar bien la RAM. No querrás que todo el sistema se quede sin recursos porque has asignado demasiado a gráficos.
  • ¿Sigues atascado? A veces es mejor pensar en una actualización de hardware: más RAM o una tarjeta gráfica dedicada puede marcar una gran diferencia, sobretodo si juegas o trabajas en edición de gráficos pesados.
  • Y no olvides hacer una copia de seguridad de datos importantes antes de tocar la BIOS. Mejor prevenir que lamentar.

Preguntas Frecuentes Rápidas

¿Qué es eso de la memoria de video?

La memoria de video, o VRAM, es la que usa tu tarjeta gráfica para almacenar datos visuales—texturas, imágenes y cosas por el estilo. Más VRAM generalmente significa gráficos más suaves y fluidos.

¿Aumentar la memoria compartida mejora los juegos?

Puede ayudar, pero no esperes milagros; en realidad, solo ayuda dentro de ciertos límites. No reemplaza la VRAM física, pero puede aliviar un poco la carga.

¿Esto hará que mi sistema vaya más lento en general?

Puede ser. Si asignas demasiado a gráficos, otras aplicaciones podrían resentirse. La clave está en encontrar un buen balance según tu uso habitual.

¿Y si mi BIOS no tiene opción para la memoria de video?

Si falta esa opción, quizás no puedas hacer mucho. En ese caso, quizás sea hora de pensar en una actualización de hardware, como una mejor RAM o una tarjeta gráfica dedicada.

¿Es seguro jugar con la configuración de la BIOS?

Por lo general, sí, si sabes lo que haces. Pero hay que tener cuidado: errores pueden impedir que el equipo arranque correctamente.

Modificar la memoria de video desde la BIOS puede ser una forma útil de mejorar el rendimiento gráfico, especialmente cuando notas ralentizaciones. No es una solución mágica, pero puede dar ese pequeño impulso que necesitas. Si no funciona, considera mejorar tu hardware, como agregar más RAM o cambiar a una tarjeta gráfica dedicada. Mantén tu sistema en buen estado y, si tienes dudas, consulta a expertos o fuentes confiables. ¡Esperamos que esto te ayude a evitar dolores de cabeza y a disfrutar de una experiencia más fluida en tareas con mucha carga gráfica!