Instalando Windows 10 desde tu teléfono — ¡Es posible!
Quizá te parezca surrealista pensar en instalar Windows 10 usando solo tu teléfono, ¿verdad? Pero te aseguro que no es imposible; solo requiere un poquito de maña. La idea es que tu teléfono sea la herramienta para preparar una memoria USB booteable con Windows 10. Lo que necesitas es descargar la ISO de Windows 10 directamente en tu móvil, transferirla a una USB y usarla para empezar la instalación en tu PC. Puede parecer complicado al principio, pero si le aguantas, puede ser un cambio total en la forma en que haces las cosas.
Consigue la ISO de Windows 10
Primero, lo más importante: busca la ISO de Windows 10. Entra desde tu teléfono a la página oficial de Microsoft para descargar Windows 10 en https://www.microsoft.com/software-download/windows10. Asegúrate de usar un navegador compatible porque algunos navegadores en móvil pueden fallar o no cargar bien archivos grandes. Y ojo, que la ISO es grande, así que libera espacio en tu móvil o te dará error al intentar descargarla. Una ISO limpia y en buen estado evita dolores de cabeza y descargas corruptas.
Consigue una app de gestión de archivos
Luego, necesitas una app para gestionar archivos si no tienes una. Para Android, muy recomendable son Solid Explorer o FX File Explorer. Para iPhone, puedes usar la app nativa de Archivos o alguna distinta como Filza. Lo importante es que la app pueda manejar conexiones con USB OTG (On-The-Go), porque más adelante conectarás la memoria USB directamente a tu teléfono. Además, navegar archivos en una pantalla pequeña puede ser un reto, así que mejor prepárate bien.
Conecta tu teléfono a la PC
Conecta tu teléfono a la PC con el cable de datos. En Android, selecciona en la notificación que la conexión sea en modo Transferencia de archivos (MTP). Solo desliza la barra de notificaciones y toca en la notificación del USB para cambiar a ese modo. En iPhone, puede ser más complicado porque generalmente necesitas usar iTunes, así que prepárate para eso. Además, si usas Android, te recomiendo activar el Depuración USB en las opciones de desarrollador, ya que puede facilitar la comunicación y solucionar problemas más adelante.
Transfiere la ISO a tu USB
Ahora que tu teléfono está conectado y la PC lo reconoce, navega hasta el archivo ISO y transfiérelo a la memoria USB. Antes, tendrás que formatear la USB para limpiar el contenido, eligiendo FAT32 o NTFS según el tamaño del archivo. Si no sabes cómo formatear, puedes hacerlo desde tu PC usando PowerShell con estos comandos (¡ten cuidado):
diskpart
- list disk
- select disk X (donde X es tu USB)
- clean
- create partition primary
- format fs=ntfs quick (o fs=fat32 quick)
- assign
Con esto, tu USB quedará lista para usarse como un medio de instalación booteable con Windows.
Haz que la USB sea booteable
Para este paso, necesitas usar la Media Creation Tool o, si te gusta el desafío, manipular la línea de comandos si tienes experiencia. Lo más sencillo es usar una PC con Windows. Abre el Símbolo del sistema como administrador y repite los comandos que hiciste antes para preparar la USB, que puede quedar así:
- Abre
diskpart
otra vez - list disk
- select disk X
- clean
- create partition primary
- format fs=ntfs quick
- assign
- exit
Luego, copia el contenido de la ISO a la USB. Para eso, herramientas como Rufus facilitan mucho el proceso. En Windows, solo seleccionas la ISO y la USB en Rufus y hacer clic en iniciar. También puedes usar la línea de comandos, pero la opción de Rufus suele ser más sencilla y segura.
Arranca desde la USB
Una vez que tienes todo listo, conecta la USB a tu PC. Reiníciala y pulsa la tecla que te permita entrar en la BIOS o en el menú de arranque (usualmente F2, F12 o Del). Si usas Windows 10, también puedes acceder a la BIOS desde Configuración > Actualización y seguridad > Recuperación > Inicio avanzado > Reiniciar ahora. Configura la USB como primer dispositivo de arranque, guarda los cambios y reinicia. Prepárate para la próxima fase y mantén la esperanza.
Instala Windows 10
Tu computadora debería arrancar desde la USB y mostrará la pantalla de instalación de Windows. Solo sigue las instrucciones: selecciona el idioma, cómo quieres particionar tu disco, si tienes clave de producto, etc. Si en algún momento algo parece fallar, presiona Shift + F10 para abrir la línea de comandos y solucionar cosas más rápidamente. Algunos usuarios encuentran útil esta opción para reparar o verificar problemas.
Consejos finales y recomendaciones extra
Procura tener tu teléfono cargado y en buen estado, ya que será tu héroe durante el proceso. Cuando hagas la USB booteable, te recomiendo usar Rufus, que hace todo mucho más sencillo. También, es buena idea hacer una copia de seguridad de tus datos importantes antes de comenzar, en caso de que algo no salga como planeas. No olvides verificar si hay actualizaciones de BIOS en tu placa madre; aunque parezca molesto, pueden evitarte muchos dolores de cabeza en el futuro.
La realidad es que los smartphones tienen más poder del que imaginamos, y usarlos para preparar instalaciones de Windows es solo una muestra de lo creativos que podemos ser con la tecnología. Con paciencia y un poco de ingenio, puedes ahorrar tiempo y molestias, evitando pasos complicados. ¡Feliz instalación!
Y recuerda, si surgen obstáculos en el camino, forma parte del aprendizaje. No te preocupes demasiado—siempre hay soluciones alternativas.