Cómo personalizar el color de la barra de tareas en Windows 11 para una apariencia personalizada

Cambiar el color de la barra de tareas en Windows 11 es un buen detalle para darle un toque personal a tu configuración. Es un ajuste sencillo, pero a veces, después de todas las actualizaciones y cambios de Windows, las opciones no aparecen de inmediato o algo simplemente no funciona como debería. Si has probado el método habitual (ir a Configuración > Personalización > Colores) y el interruptor para “Mostrar color de énfasis en Inicio, barra de tareas y centro de actividades” no aparece o está atenuado, no te preocupes; hay algunos trucos que pueden ayudarte a que vuelva a funcionar. Básicamente, se trata de asegurarte de que Windows esté completamente actualizado y, en algunos casos, modificar algunas configuraciones ocultas o ajustes del registro para darle un toque de estilo. Una vez arreglado, la barra de tareas adquiere ese toque de color fresco, a juego con tu fondo de pantalla o con el estilo que buscas. Es bastante satisfactorio cuando por fin todo encaja y consigues un aspecto uniforme y agradable sin cambiar de tema ni hacer nada complicado.

Cómo solucionar problemas y habilitar la coloración de la barra de tareas en Windows 11

Buscar actualizaciones de Windows y actualizar la configuración

Primero, asegúrate de que Windows esté ejecutando la última versión. A veces, las funciones fallan cuando te quedas atrás de algunas actualizaciones. Ve a Configuración > Windows Update y haz clic en Buscar actualizaciones. Instala todas las actualizaciones disponibles, especialmente las opcionales, ya que suelen incluir correcciones para errores de la interfaz de usuario. Después de actualizar, reinicia tu PC y vuelve a Configuración > Personalización > Colores. Ahora, comprueba si el interruptor aparece. Si sigue sin aparecer, continúa con el siguiente truco.

Habilite la configuración de color a través del Registro (si se siente cómodo con Regedit)

Esto es como sortear las partes ocultas de Windows, pero puede funcionar cuando el interruptor no está activo o no funciona. Abra el Editor del Registro pulsando [ ] Win + R, escribiendo [ ] regedity pulsando Intro. Vaya a HKEY_CURRENT_USER\Software\Microsoft\Windows\CurrentVersion\Themes\Personalize. Busque un DWORD llamado ColorPrevalence. Si no existe, créelo; si existe, establezca su valor en [ ].1Esto suele obligar a Windows a mostrar las opciones de color correctamente. Tenga cuidado: cambiar los valores del registro puede causar problemas si no tiene cuidado. Vale la pena intentarlo, y a veces finalmente hace que el interruptor vuelva a estar visible.

Cambiar temas de Windows o restablecerlos

Algunos usuarios informan que cambiar o restablecer el tema de Windows 11 les ayuda. Vaya a Configuración > Personalización > Temas. Elija un tema diferente temporalmente y luego vuelva a cambiarlo. A veces, un fallo del tema interfiere e impide que aparezca el interruptor de color de énfasis. Después de esto, compruebe si ya puede activar o desactivar su color favorito en la barra de tareas. En algunas configuraciones, este pequeño truco soluciona el problema del interruptor invisible.

Restablecer la configuración de personalización de Windows

Si todo lo demás falla, restablecer la configuración de personalización a sus valores predeterminados podría eliminar cualquier configuración dañada. Puedes intentar ejecutar un comprobador de archivos del sistema o restablecer configuraciones de personalización específicas mediante el Símbolo del sistema o PowerShell. Por ejemplo, abre PowerShell como administrador y ejecuta sfc /scannow. Esto analiza los archivos del sistema en busca de problemas, lo que a veces puede corregir errores que afectan a funciones de la interfaz de usuario, como los cambios de color. No siempre está garantizado, pero es una opción de bajo impacto si algo parece fallar.

Recuerda, a veces basta con reiniciar o iniciar sesión rápidamente para que todo funcione correctamente. A Windows le gusta complicarnos la vida, y es un poco raro que, a veces, modificar algunas configuraciones requiera reiniciar, aunque parezca innecesario.

Al final, estas pequeñas soluciones alternativas ayudan cuando Windows decide ocultar o deshabilitar las opciones de personalización de color. La clave está en asegurarse de que todo esté actualizado, ejecutar los comandos adecuados y, a veces, simplemente obligar a Windows a actualizar la interfaz de usuario. No sé por qué funciona, pero en una máquina, una actualización completa y un ajuste del registro solucionaron el problema; en otra, reiniciar justo después de cambiar las preferencias ayudó. A veces, Windows tiene que complicar las cosas.