Cómo salir del modo de pantalla completa en Windows: pasos sencillos para todas las aplicaciones

Activar el modo de pantalla completa es genial para disfrutar de vídeos o juegos inmersivos, pero a veces solo quieres volver a tu espacio de trabajo habitual sin tener que preocuparte. Es un poco raro cómo algunas aplicaciones se quedan en pantalla completa incluso después de verlas o jugar, y luego te quedas pensando cómo salir. Normalmente, solo se trata de unos cuantos comandos o trucos con el ratón, pero cada aplicación puede ser un poco diferente. Esta guía debería ayudarte a volver a la normalidad rápidamente, tanto si prefieres atajos de teclado como gestos del ratón. Recuperarás el control de tu pantalla y evitarás ese frustrante momento de preguntarte por qué desapareció tu escritorio.

Cómo salir del modo de pantalla completa en Windows

Método 1: Atajos de teclado que suelen funcionar

La mayoría de las veces, la tecla “Esc” es tu mejor aliada. Presiónala cuando la pantalla esté bloqueada en pantalla completa, ya sea en un navegador, un reproductor de vídeo o alguna aplicación. Es como presionar una salida de emergencia para volver al modo ventana. Si eso no es suficiente, “F11” suele ser la tecla mágica en navegadores o algunas aplicaciones; imagínate que es como accionar un interruptor. Además, en algunas configuraciones, presionarla Alt + Enterfunciona en juegos o reproductores multimedia. Estos son los métodos rápidos y sencillos que suelen funcionar.

Método 2: mover el mouse o usar la barra de tareas

A veces, solo tienes que mover el cursor a la parte superior de la pantalla en modo de pantalla completa, ya sabes, donde la barra de herramientas oculta se esconde tras la cortina. Al mover el ratón ahí, deberían aparecer los controles de la ventana. Cuando aparezcan, simplemente haz clic en el botón de minimizar o en el icono para salir de pantalla completa, si está disponible. Es como correr una cortina: súper visual y sencillo. O bien, pulsa la tecla “Windows” para abrir la barra de tareas y luego haz clic en otra ventana o icono. Esto obliga a la aplicación actual a pasar a segundo plano, saliendo del modo de pantalla completa.

Método 3: Cambiar con atajos para realizar múltiples tareas

Úsalo Alt + Tabpara navegar entre las aplicaciones abiertas. Mantén presionada la tecla Alt y mueve la tecla de tabulación hasta que el cursor se ubique en la aplicación que quieres que salga de pantalla completa. Es útil cuando el atajo de teclado o el truco del ratón fallan; a veces Windows simplemente se resiste, sobre todo con los juegos o ciertas aplicaciones de streaming. Es un poco raro, pero en algunos equipos, la primera vez no funciona; luego, tras un segundo intento o con otro método, finalmente se establece en modo ventana.

Método 4: Para configuraciones de dos monitores y configuraciones de aplicaciones

Si tienes varios monitores, mover una ventana entre pantallas a veces puede hacer que deje de estar en pantalla completa. Además, revisa las preferencias de tu aplicación; a veces hay una opción para activar el modo de pantalla completa en el menú de configuración. Esto es especialmente común en juegos o software de edición de video. Al ir a Configuración > Pantalla u Opciones > Video, podría aparecer una casilla para activar el modo de pantalla completa, que puedes desactivar.

Consejos para salir del modo de pantalla completa sin sudar la gota gorda

  • Algunas aplicaciones tienen sus propias teclas de pantalla completa, como Ctrl + Shift + F o Alt + F4, pero tenga cuidado, ya que Alt + F4 cerrará la aplicación por completo.
  • En los juegos, alternar Alt + Enter a menudo ayuda a volver al modo de ventana.
  • Si los atajos de teclado no funcionan correctamente, intenta reiniciar la aplicación o incluso reiniciar tu PC; a veces, Windows solo necesita un nuevo comienzo.
  • Comprueba si tu controlador de gráficos necesita una actualización: te sorprenderías de cuántos problemas extraños se solucionan con una rápida actualización del controlador.
  • Para las aplicaciones que permanecen obstinadamente en pantalla completa, consulte sus documentos de ayuda; algunos programas ocultan esta opción en lo profundo de sus menús.

Preguntas frecuentes

¿Qué pasa si la tecla “Esc” no sale de la pantalla completa?

Entonces prueba F11 o Alt + Enter. A veces, la tecla para cambiar a pantalla completa varía según la aplicación o el juego.

¿Puedo hacer este proceso más rápido a través de la configuración?

En algunos casos, sí, sobre todo en aplicaciones o navegadores. Consulta la configuración de tu aplicación o el menú de preferencias; suele haber una casilla para iniciar o salir del modo de pantalla completa con un acceso directo personalizable.

¿Qué pasa con las aplicaciones de streaming como YouTube o Netflix?

Normalmente hay un botón para alternar entre pantalla completa o simplemente pulsa Esc. Si nada funciona, prueba a actualizar la página o a reiniciar la aplicación. Además, comprueba si hay extensiones del navegador o bloqueadores de anuncios que puedan bloquear las funciones normales.

Resumen

  • Intente presionar Esc o F11.
  • Mueva el mouse hacia la parte superior para revelar los controles, luego haga clic en salir.
  • Úselo Alt + Tabpara cambiar entre aplicaciones de pantalla completa.
  • Haga clic en otra ventana de la barra de tareas para forzar un cambio.
  • Verifique la configuración de la aplicación para alternar entre pantalla completa.

Resumen

Salir del modo de pantalla completa no siempre es intuitivo, sobre todo con aplicaciones o juegos raros que ignoran los atajos típicos. Pero normalmente, una combinación de trucos de teclado y navegación con el ratón hará que la ventana vuelva a su tamaño normal. Es un poco molesto cómo Windows o las aplicaciones a veces prefieren permanecer en pantalla completa solo para complicar las cosas, pero con estas estrategias, deberías volver a la normalidad enseguida. Sigue experimentando; a veces, la acción más simple, como pulsar Esc, funciona. Crucemos los dedos para que esto ayude a evitar la frustración de quedarse atrapado en el modo de pantalla completa más tiempo del necesario.